La Segunda Cristera en Los Altos de Jalisco

"La historia es una lucha entre los seguidores del único Rey de la creación y sus opositores comandados por Satanás y sus legiones. En ella los hombres son actores en favor de uno u otro".

martes, 16 de diciembre de 2014

El tercer encuentro Guadalupano, ahora en el Vaticano




"Para mí, fue un momento muy significativo el poder realizar una oración de los fieles en náhuatl, precisamente, la lengua de nuestros antepasados, pero también la lengua que usó Santa María de Guadalupe para manifestar su maravilloso mensaje."

Canónigo Dr. Eduardo Chávez 


Desde que se concluyó el Congreso Guadalupano que coordinó la Pontificia Comisión para América Latina en la Basílica de Guadalupe en noviembre del 2013, surgió la idea de tener un nuevo encuentro en la Santa Sede en donde se continuara conociendo más y más a Santa María de Guadalupe. Además, la gran motivación para realizar esto vino del mismo Santo Padre, Francisco, pues es conocida su gran devoción a la Virgen de Guadalupe, sus palabras en el mensaje que envió en aquel Congreso todavía resuenan en la mente y en el corazón de todos los que nos encontramos en ese importantísimo Evento en la Basílica de Guadalupe. “Jesús y nosotros tenemos la misma Madre” decía el Santo Padre.

Es por ello que nuevamente fue invitado a colaborar el Instituto Superior de Estudios Guadalupanos, fundado por el Cardenal Norberto Rivera Carrera. Es la tercera vez que el Instituto participa en estos Magnos Congresos organizados por la Pontificia Comisión para América Latina, el primero de ellos fue en la Santa Sede (12 de Diciembre de 2012), un segundo Congreso se realizó en la Basílica de Guadalupe (16 al 19 de Noviembre de 2013) y ahora, nuevamente, en la Santa Sede (12 y 13 de Diciembre de 2014), este tercer Congreso.

El día 12 de Diciembre de 2014 se inició un primer momento fuerte en la Basílica de San Pedro con el Rosario del Amor Guadalupano que tuvo lugar a las 4:30 pm y, un segundo momento, a las 6:00 pm, fue la Santa Misa, presidida por el Papa Francisco y concelebrada por cientos de sacerdotes de todo el mundo. El altar de la Confesión, altar donde celebra el Santo Padre, estaba engalanado con la presencia de una hermosa imagen de Santa María de Guadalupe, cubierta de flores. En los cantos estuvo un coro interpretando la Misa criolla y junto con el Coro de infantes lograron una atmósfera única; que nunca antes se había escuchado en San Pedro.



Para mí, fue un momento muy significativo el poder realizar una oración de los fieles en náhuatl, precisamente, la lengua de nuestros antepasados, pero también la lengua que usó Santa María de Guadalupe para manifestar su maravilloso mensaje, en “su amable aliento, su amable palabra” a Juan Diego y que él llevaría ante el obispo, fray Juan de Zumárraga. Pero algo totalmente inesperado fue el inmenso honor que me hicieron los Caballeros de Colón y, de una manera muy especial, mi hermano el Señor Carl Anderson, la invitación para que yo entregara directamente al Santo Padre, la llamada “Rosa de Plata”.

Esta “Rosa de Plata” que había recorrido Canadá, Estados Unidos y México y había llegado a la Basílica de Guadalupe el 30 de Noviembre, y de ahí fue traída a Roma; y ahora me tocaba a mí entregarla en manos del Santo Padre como signo de unidad de todos los pueblos guiados por la Virgen de Guadalupe, estrella de la primera y de la nueva evangelización, representando a tantos pueblos del Continente Americanos. 


Llegó el ceremoniero para que lo siguiera hasta el lugar preparado, al iniciar las escaleras, él se quedó abajo, yo subí las escaleras y me arrodillé ante el Papa, y le dije “Su Santidad, gracias a los Caballeros de Colón, esta Rosa de Plata ha sido traía caminando, peregrinando, desde Canadá, Estados Unidos y México, ha llegado hasta la Basílica de la Virgen de Guadalupe y ha continuado su peregrinación hasta Su Santidad. Esta Rosa a recogido las tristezas y los sufrimientos, el dolor y las fatigas de tantos hermanos nuestros, pero también las alegrías y las esperanzas que despierta el gran amor que manifiesta Su Paternidad. Santo Padre… es cierto, Dios ha querido venir a vivir en medio de nosotros por medio de Santa María de Guadalupe, y esta es la señal, hágame el favor de recibirla.” El Papa la besaba y me decía con la cabeza “sí” y añadía “rueguen a Dios por mí”, “rueguen a Dios por mí”, me paré y antes de bajar hice una pequeña reverencia ante el Papa y cuando llegué delante de la Imagen de la Virgen de Guadalupe también hice una reverencia y así baje las escaleras, y tenía que seguir a mi escolta, pero me desprendí de él y fui presentar mi alegría a quien es el custodio de la Imagen, mi Señor Cardenal Norberto Rivera, quien me dijo...”Mira como el Santo Padre está poniendo la Rosa ante la imagen de Santa María de Guadalupe”. Yo estaba impactado, tenía en mi mente la sonrisa del Santo Padre, sus besos a la Rosa de Plata, los ojos con los que me miraba, bien abiertos, especialmente cuando comprendió que le estaba diciendo algunas palabras que recordaban las mismas palabras san Juan Diego, y sus palabras llenas de cariño y humildad cuando me decía: “Rueguen a Dios por mí”.

Después de que el Papa se quedó largo rato en oración ante la Imagen de la Virgen de Guadalupe, se retiró en procesión.

Todo fue un momento inmensamente lleno de Dios. Pero todavía no terminaba todo pues al siguiente día sábado 13 de Diciembre en el Auditorio del Augustiniano.

Desde las 9:30 de la mañana tuvo lugar el Coloquio y las Conferencias que el Instituto Superior de Estudios Guadalupanos sostuvo. Se Inició con la presentación del Documental “La Virgen de Guadalupe” que los Caballeros de Colón patrocinaron y el Instituto coordinó contenidos, fue una síntesis de cuarenta minutos, de verdad está extraordinario. Posteriormente la primera conferencia “La perfecta inculturación del Evangelio” que corrió por cuenta mía y la segunda conferencia que se realizó tipo Coloquio, “Los estudios científicos más recientes de la Imagen” en donde sostuvimos un panel donde la Lic. en Arte, Laura Castillo, y el C.P. y especialista en Matemáticas, Fernando Ojeda, manifestaron en qué consistían los más interesantísimos estudios e investigaciones, desde el ángulo de las ciencias exactas, aportando las más rigurosas pruebas que lo constatan. Fue un Coloquio muy bien llevado, de mucha altura y despertaron en muchos una verdadera admiración y motivación también en este tipo de estudios.

No cabe duda que fue un encuentro por demás importante en donde Santa María de Guadalupe sigue siendo la discípula y misionera del amor de Dios, la Primera evangelizadora del Continente y de muchos lugares en el mundo. Desde la Santa Sede “casita sagrada” se sigue difundiendo este mensaje que puede cambiar el corazón del ser humano, gracias al Amor.


Fuente: http://www.siame.mx/



¡Viva Cristo Rey y Santa María de Guadalupe!




No hay comentarios.:

Publicar un comentario